Cobertura de Boda Civil Mafer & Joel
Lugar: Rest. Meze, Ciudad de Panamá, Panamá
Fecha:
Hay pequeños rincones llenos de magia en la ciudad de Panamá. Después de vivir aquí 20 años de mi vida me parece increíble que haya aún tantos pedacitos de cielo por descubrir. Los gracioso es que mientras más encuentro más me doy cuenta que un pedacito de cielo se puede encontrar casi en cualquier lugar y Panamá es realmente rica en belleza por descubrir.
La boda civil de Mafer y Joel fue en realidad mi primera boda civil de íntima, es decir con un número reducido de invitados. Nunca había cubierto una boda como esta, pero después de la experiencia me enamore por completo. Quizás fue porque Mafer, Joel y su familia son gente bella y feliz e hicieron que la cobertura fuera no sólo un éxito sino un rato realmente divertido y sentimental. Yo siendo tan sentimental como soy, obvio me sentí conmovida con cada gesto genuino de amor y cariño del que fui testigo.
La boda se celebró en una tarde de invierno en Panamá, pero Diosito la pinto de verano. La luz era bella tanto afuera como el resplandor que arropaba todo el salón donde se dio a cabo la ceremonia. Y fue una boda sencilla, sí, pero hubo tanto detalle y planeación para llevarlo a cabo. Lo más bello de todo lo que se preparó y monto fue realmente saber que cada cosa había sido planeada y preparada por la novia y su familia.
La ceremonia se dio a cabo en un rincón del salón del almuerzo. Los novios estaban rodeados por sus familiares que los acompañaban de pie y los testigos los mejores amigos de los novios respectivamente. Todos se divirtieron, rieron y dejaron caer una que otra lágrima cargada de emoción. El novio dio un discurso cuál orador profesional cuando compartieron sus votos y Mafer, más nerviosa, leyó sus votos que tenía preparados.
El pastel se robó el show. Mafer es una talentosa chef pastelera y obviamente no pudo dejar pasar la oportunidad de confeccionar su propio pastel de bodas. Es uno de los pasteles más RICOS y hermosamente decorados que he visto y probado en mi vida. El detalle fue sublime y la presentación fabulosa.
Después de la ceremonia y antes que sirvieran el almuerzo corrimos a sacar algunas fotitos de la pareja y me enamoré otra vez de ser fotógrafa, de las bodas y de estos dos. Sus ojos estaban repletos de amor y cada sonrisa terminó en un carcajada. Definitivamente, meant to be.